OMEGA Packing tiene una línea de crecimiento constante con muchos proyectos por desarrollar en la zona del norte de Suramérica, Centroamérica y el Caribe.

A nivel mundial existe un problema grave con el vidrio porque no se consigue tan fácil y los industriales, especialmente del sector licorero, están pensando en volver a reusar los envases de vidrio tal como lo hacían antes. 

“Hasta hace unos años casi todas las licoreras a nivel mundial reutilizaban los envases de vidrio. Los compraban y los lavaban para volverlos a usar. Pero esas lavadoras de envases eran muy grandes y costosas porque para rehusar un envase de vidrio debe estar exageradamente bien lavado” explicó Juan Ramón Villa, Director General de Ventas de OMEGA Packing, líder mundial en asesoría de equipos de envasado, etiquetado y empaque.  

Comentó que esto fue cambiando en la medida en que el vidrio se hizo retornable y fue más fácil de conseguir. Pero ahora las máquinas lavadoras son una verdadera necesidad para la industria “y no hay duda que en OMEGA Packing tenemos las mejores”. 

Villa es el líder integrador y representante de los fabricantes italianos en equipos de envasado, etiquetado y empaquetado en Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Colombia, Ecuador y las islas del caribe donde se habla inglés.

Comentó que toda la región que lidera ha estado políticamente cambiante. “En Nicaragua, por ejemplo, encontramos que hay una separación política entre cómo se maneja el país y cómo funciona la industria. Allí está asentada la licorera que produce el ron Flor de Caña que es uno de los más importantes del mundo. La industria del licor ha sido boyante a pesar de haber tenido una situación política compleja en ese país”, señaló. 

Precisó que en Colombia la industria no se ha parado. “La industria está a la espera de las políticas del gobierno, pero mientras espera sigue avanzando. Así el año pasado vendimos líneas licoreras en el Cauca y en Caldas y estamos en negociación para la venta de una línea en Antioquia, Medellín. El dato peculiar es que el ingreso por licores en las regiones se usa para infraestructura y educación, de manera que eso debe continuar” dijo. 

Mencionó que otro caso que vale la pena resaltar es Panamá, un país que ha crecido rápidamente en los últimos 20 años y que se ha convertido en el receptor de la producción de esas empresas que quieren asegurar su producción y ven riesgo en su país. Allí se han instalado líneas de producción del ron Flor de Caña y también del ron Santa Teresa de Venezuela. 

Mercado con mayor proyección

Para Villa, Guatemala es un mercado con una gran proyección para OMEGA Packing. “Lidera la industria de las maquinarias de envasados. Allí están los rones Zacapa y Botran que son excelentes licores de reconocida calidad. Hay industrias grandes, además de la licorera, como la de alimentos.  Allí está Alimentos Maravilla que produce jugos, compotas, néctares, aguas, sodas y es bastante grande. También está Alimentos Kerns que produce compotas, frijoles y sopas”, dijo.

Comentó que en el Caribe hay muchas islas con industria de licores bastante grandes. Barbados por ejemplo cuenta con la destilería Mount Gay que produce el ron 1703 considerado el más antiguo del mundo. También en Santa Lucía, Trinidad y Tobago, Jamaica y República Dominicana tienen sus industrias importantes. 

“El Salvador, a pesar de todos sus problemas de inseguridad tiene mucha industria importante licorera, de jugos y de alimentos. Honduras por su parte, tiene una industria en franco crecimiento y hay empresas que estamos visitando y proyectos interesantes que están avanzando. Ecuador: tiene bastantes licoreras y tiene una buena industria de alimentos y de aguas saludables. En todos hay ganas de crecer y producir. Y a todos hay que atenderlos y atenderlos bien”, añadió. 

Las más populares

Villa indicó que generalmente las licoreras compran líneas completas pero las máquinas de etiquetado tienen su demanda aparte. Afirmó que los industriales han entendido que la etiqueta de un envase es muy importante y la tecnología que se ha desarrollado en torno al etiquetado no solo facilita su funcionamiento, sino que le da mayor prestancia al producto.  El final de línea está creciendo bastante porque los industriales se están dando cuenta de lo importante que es la presentación del producto. Aquí tienen respaldo de varios fabricantes italianos.

“Antes las etiquetas se ponían en caliente pero la autoadhesiva ha tomado bastante fuerza porque la policromía que se obtiene es de más alta calidad que la de papel que se coloca con goma caliente o fría. Cuando se coloca una etiqueta con pegamento es necesario parar la máquina para hacer un lavado a todas las partes que están en contacto con la etiqueta. En las máquinas con etiquetas autoadhesivas no pasa eso, y los clientes han optado por este tipo de máquinas para mejorar. Así la máquina más popular es la etiquetadora autoadhesiva”, indicó.

Y es que un producto bien etiquetado llama más la atención. Por esto se van cambiando algunas máquinas de la línea para mejorar y eso es muy común. Comentó sobre la Simple cut, diseñada por PE, que tiene un sistema de corte de la etiqueta y de pegado diferente a la de las otras máquinas que tenían varios tambores. Esta tiene un solo tambor y cerca de 7 cuchillas en vez de dos y requiere un mantenimiento menos frecuente. Es más sencilla y eficiente y está siendo requerida por muchos industriales. Ya se han vendido varias en Latinoamérica. 

“Tenemos grandes perspectivas para este año. A raíz de la experiencia con los clientes, los fabricantes italianos que no representamos nos han llamado para que los representemos y eso nos ha permitido ir ampliando nuestro portafolio para poder entrar en aquellos mercados que no habíamos incursionado. Hemos crecido considerablemente en la parte de administración y servicio. Seguiremos en esa línea de crecimiento, siempre que podamos atenderlo. Para ello tenemos técnicos bien preparados y ese punto es clave.  Estamos muy contentos con lo que hemos logrado en 6 años en el mercado y llegamos donde pensamos que íbamos a llegar. Lo que sigue exige un mayor esfuerzo técnico y de asesoría al cliente”, concluyó.